Nehemías 8,2-4a.5-6.8-10; Salmo 18,8.9.10.15; Corintios 12,12-30; Lucas 1,1-4;4,14-21
27 de enero de 2019
P. Chava, SVD |
La palabra es tan importante como todo lenguaje que nos permita comunicar
ideas, pensamientos, enseñanzas y experiencias. La Palabra de Dios es fuente de
vida y de liberación. Tus palabras me dan vida confío en ti Señor; tus palabras nos dan vida
eterna, esperanza, justicia, caridad y fe en nuestras vidas.
P. Chava, SVD |
En la primera lectura vemos como Nehemías cien años después de la llegada
Exilio convoca al sacerdote e escriba Esdras para que motive al pueblo de Israel
a un nuevo resurgimiento. Esdras hace una nueva alianza con Dios, al leer el
libro de la ley en la plaza; el judaísmo nace con escucha de Palabra de Dios el
pueblo se conmueve. Es el comienzo de una nueva era, de una nueva esperanza,
basada en la Palabra de Dios. Pues Dios se hace presente en su pueblo a través
de la Palabra, será el eje motor de toda reconstrucción de Jerusalén.
En la carta a los Corintios nos habla del cuerpo místico de Cristo, en
ese comunidad es notorio las diferencias por ideologías, dones, funciones y
servicios; las diferencias entre personas nos separan y nos dividen, en vez de
unirnos. Por eso Pablo insistirá, que los cristianos nos unimos a Jesús y cada
uno forma parte del cuerpo de Cristo; es necesario entender que es de vital
importancia estar unidos en comunidad, porque todos son importantes y al mismo
tiempo todos necesitan la ayuda de todos, porque todos forman un solo cuerpo,
porque todos estamos unidos en un solo bautismo y una sola fe.
P. Chava, SVD |
Lucas catequiza a Teófilo, es decir al iniciado, este mensaje va dirigido
como prólogo a todos los lectores de su evangelio. En sábado Jesús va a la Sinagoga:
lee “el Espíritu de Dios está sobre mí”, es la frase que Jesús afirmará como
comienzo de su misión mesiánica. En el inicio de su misión empieza usando las
palabras de Isaías para renovar al pueblo de Israel. Porque Jesús vino a liberar,
sanar y motivar al pueblo de Israel. Los milagros y acciones simbólicas de
liberación y sanación, darán fe de que dice la verdad.
P. Chava, SVD |
Las lecturas nos ayudan tomar en serio la Palabra de Dios como la fuente
de adsorción de la fuerza de Dios. Como el origen de la vida y para potenciar
lo que hay a su máxima expresión de alcance.
Todo ser humano que se une a Dios en su Palabra, se nutre de ella y se vuelve
una persona llena de esperanza, fe, justicia social, fuerte para dar testimonio
en obras y palabras. El Reino de Dios, surge al contar con personas llenas de
Dios, que lo dan todo para gloria de Dios, para humanizar más al ser humano.
P. Chava, SVD: Misionero
del Verbo Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia,
Diócesis de Madrid, España.
Palabra de Dios