lunes, 18 de noviembre de 2019

Jesucristo Rey del Universo, 34º del Tiempo Ordinario. Ciclo C

34º del Tiempo Ordinario. Jesucristo Rey del Universo – Ciclo C
Samuel 5,1-3; Salmo 121; Colosenses 1,12-20; Lucas 23,35-43
24 de noviembre de 2019

P. Chava, SVD, Cristo del Corcovado, Río de Janeiro, Brasil.

Viva Dios Uno y Trino en nuestros corazones y en los corazones de toda la humanidad. Señor en ti ponemos nuestra confianza, nuestras vidas, queremos hacer tu voluntad y hacer visible el Reino de Dios aquí y ahora.

En la segunda lectura leemos en Samuel, que para llegar a gobernar hay que haber reconocimiento de los integrantes del gobierno, tiene que existir pactos y alianzas con sus condiciones. Así es como un pastor se convierte un rey, es un ungido por los sabios del pueblo de Israel. El rey David será de los más famosos de los reyes en la humanidad.


P. Chava, SVD, Castillo de san Xavier, Navarra, España. 

En la segunda lectura Pablo escribe a los colosenses y les hace una síntesis de la historia de la salvación: Jesús existía antes de la creación, junto con el Padre crearon todo, por derecho propio le pertenece todo, agrega que gracias a la sangre derramada de Jesús el pecado quedo limpio de sus culpas, la redención es real y eficiente, por tanto, mirar al crucificado nos hace ver a nuestro Dios que dio la vida para salvarnos.

En el evangelio, nos narran los últimos momentos de vida de Jesús en la cruz, muchos se burlaban de su mesianismo y de su impotencia por no poder salvarse a si mismo, para no morir crucificado en la cruz; lugar reservado para la gente indeseable del imperio, y cuya muerte es lenta, humillante y muy dolorosa. Jesús mismo en una situación tan inhumana da esperanza de vida a eterna para los que asisten y para su acompañante crucificado que lo defendió. Los cristianos creemos que la muerte en la cruz fue para cumplir la voluntad de Dios y para que su muerte nos redima de nuestros pecados.

P. Chava, SVD y el Cristo de san Xavier, Navarra, España.
En el final del año litúrgico Ciclo C, nos encontramos con las lecturas que son muy significativas, pues nos orienta a entender el gran amor que Dios tuvo al hacer el mundo; al mandarnos a su Hijo para tráenos palabras y obras de vida eterna; Jesús cumplió con la voluntad de Dios y nos hizo tomar conciencia del Reino de Dios esta en la etapa inicial con el pueblo de Dios. Ahora que terminamos este ciclo litúrgico, nos unimos a millones de cristianos que quieren hacer visible el Reino de Dios en sus vidas en su totalidad.

P. Chava, SVD, y el Cristo de san Xavier, Narra, España.
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Párroco in solidum de las unidades pastorales en Villatuerta, Oteiza, Noveleta, Grocin y Murillo, en Navarra, Diócesis de Pamplona, España.


domingo, 17 de noviembre de 2019

Confía en Dios, 33º Tiempo Ordinario Ciclo C


33º Tiempo Ordinario Ciclo C
Malaquías 3,19-20; Salmo 97; 2 Tesalonicenses 3,7-12; Lucas 21,5-19

17 de noviembre de 2019



P. Chava, SVD
En el Señor pongo mi vida y mi esperanza de salvación. Dios es justo y busca la salvación de los hombres de manera especial de aquellos que han dejado de conocerle o amarle. El señor se vale de los creyentes para obrar en nombre de Dios sus maravillas.



En la primera lectura Malaquias dicta sentencia donde los malhechores y los orgullosos serán castigados por sus faltas, por otra parte, los justos serán recompensados y bendecidos por Dios. Confiemos en el Señor para que haga justicia con nuestras vidas según su juicio. Y si es el caso tenga compasión de nosotros, y rectifiquemos nuestros caminos para unirnos a Dios en su voluntad.



P. Chava, SVD
 En la segunda lectura Pablo se dirige a la comunidad de Tesalonica, con cierta severidad, pues se ha enterado de que en la comunidad hay algunas personas que no quieren trabajar, pues para ellos no tiene sentido trabajar, pues pronto este mundo se acabara con la venida de Jesús. Sin embargo, el mismo Pablo se pone como modelo de una persona responsable para trabajar y para evangelizar, con sus propias manos él se gana la vida. De ahí que venga su enfado: “el que no trabaje que no coma”.




En el evangelio Jesús advierte que los días del templo de Jerusalén están contados, la grandeza de la casa de Dios se vendrá abajo: “no quedará piedra sobre piedra”. En los inicios de la comunidad cristiana les tocará vivir estos momentos de muerte y destrucción. Inclusive los primeros cristianos serán perseguidos, pero ellos no deberán tener miedo, pues Dios enviará su Espíritu para defenderles de sus adversarios.

P. Chava, SVD


Dios se hace presente en la vida de los hombres y mujeres que confían en el Señor, pues ellos perciben su presencia en sus vidas. Por eso amar y servir a Dios, es cuestión de fe y de fidelidad, y quien tenga ambas cualidades conocerá el rostro de Dios en vida y en la vida eterna, con Dios de su lado se sentirá fuerte, libre y con deseos de mejorar el mundo y la humanidad.



P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Párroco in solidum de las unidades pastorales en Villatuerta, Oteiza, Noveleta, Grocin y Murillo, en Navarra, Diócesis de Pamplona, España.








domingo, 10 de noviembre de 2019

Seremos probados en la fe, 32º del Tiempo Ordinario, Ciclo C

32º del Tiempo Ordinario, Ciclo C
Macabeos 7,1-2.9-14; Salmo 16; 2 Tesalonicenses 2,16–3,5; Lucas 20,27-38
10 de noviembre de 2019

P. Chava, SVD
Seremos probados en la fe en especial: cuando nos sintamos perseguidos o señalados por tener una fe y expresarla libremente en público. Siempre nos encontraremos con personas que quieran derribar nuestra fe, pero nuestra fidelidad a Dios hará de nosotros fieles testigos del amor de Dios en el mundo. Encendiendo nuestra luz que es la fe en Dios, en medio de la oscuridad que el mundo quiere provocar al apagar la fe de miles de personas.

En la primera lectura encontramos el testimonio de fe, de los judíos que prefirieron ser torturados hasta la muerte antes que negar su religión y sus tracciones por amor a Dios y su pueblo. Murieron con la convicción en su fe, y sabiendo que Dios los resucitará, que el Señor reconocerá su sacrificio. Por tanto, la sangre de los mártires es semilla de fe, para las nuevas generaciones.

P. Chava, SVD
En la Segunda lectura san Pablo, se dirige a la comunidad de Tesalónica, y les dice que él reza a Dios, para que consuele sus corazones y les dé fuerza para superar la maldad del ser humano. Al mismo tiempo san Pablo les pide que ellos hagan lo mismo por él y por su comunidad de corintio. Pide a Dios que dirija sus corazones hacia el amor de Dios y la paciencia en Cristo. Para así adoptar el ser de Dios que es: amor y misericordia, lento a la cólera y rico en piedad. 

En el evangelio quieren poner una trampa a Jesús con un problema de tiene que ver con el sacramento del matrimonio y con la ley del levirato, donde el nombre o apellido del difunto debe continuar, en la descendencia, que son los hijos. Por eso le presentan el hipotético caso de una mujer casada con siete hermanos, pero con ninguno pudo dejar descendencia, es decir, no pudo tener hijos con ninguno de los siete; pero las cuestiones son las siguientes: ¿hay vida después de la muerte?, y si la hay, ¿ella con a quien pertenece, o mejor dicho, con quién está realmente casada, si se casó con los siete hermanos? La respuesta de Jesús deja sin palabras a los oyentes: el vinculo conyugal deja de existir en la vida eterna, ya no hace falta estar casados. Jesús afirma con todas las letras, que, si hay vida eterna, es más Jesús expresa que Dios es: un Dios de vivos y no de muertos.

P. Chava, SVD
Las lecturas nos dicen la verdad, y nos hacen conscientes que el mal y la maldad del ser humano existen; que las personas buenas tendrán que superar muchas pruebas en la vida, pero con la ayuda de Dios todo es posible y superable, para ello es recomendable la oración de intersección, pues Dios consolará y fortalecerá los corazones de todos hijos que le piden ayuda. Con Dios de nuestro lado: nada es imposible y todo se soporta en el Señor; es más, nos garantiza la vida eterna, y ese mejor consuelo para todos los creyentes.  Tener a Dios en esta vida y en la vida eterna.

P. Chava, SVD

P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Párroco in solidum de las unidades pastorales en Villatuerta, Oteiza, Noveleta, Grocin y Murillo, en Navarra, Diócesis de Pamplona, España.




domingo, 3 de noviembre de 2019

Cambia, 31º del Tiempo Ordinario, Ciclo C


31º del Tiempo Ordinario,


Ciclo C

Sabiduría 11,22–12,2; Salmo 144; Tesalonicenses 1,11–2,2; Lucas 19,1-10

3 de octubre de 2019



P. Chava, SVD
Cambia, todo cambia, cambia la vida, cambia la gente, cambia los lugares que conocemos. Dios nos invita también a cambiar, por todo el amor que nos tiene, que cambiemos y mejoremos nuestras vidas.



En la primera lectura: el libro de sabiduría, el autor narra las maravillas de Dios; nos hacer recordar nuestros orígenes, Dios hizo todo maravilloso y bello; hermoso y perfeto. Pero el ser humano, quiebra las maravillas de Dios con la autodestrucción, es decir, con sus pecados, con sus egoísmos, cuando impera sus propios intereses por encima de todo los demás.  Pero Dios perdonará y ayudará a quien decida cambiar de vida y mejorarla, dejando sus pecados en el pasado.



En la segunda lectura Pablo dirige unas palabras de aliento y esperanza en el Señor, a los Tesalonicenses como a nosotros, que en todo momento aspiremos a tener una conducta honorable de hacer el bien y hacer con la fe que hemos recibido.  También nos invita a tener confianza en el Señor que él vendrá en el momento adecuado y no cunado los hombres, lo deseen o digan.



En el evangelio, Jesús va al encuentro de Zaqueo, le pide ir juntos a su casa, este gesto conmueve a Zaqueo. En este relato nos muestra como el hombre y Dios se buscan mutuamente, ya sea por curiosidad o por necesidad. El encuentro entre la divinidad y la humanidad, une la historia en un mismo fin: la salvación del ser humano.

P. Chava, SVD


En nuestras vidas siempre buscamos la compañía, de alguien o de algo. El buscar a personas o a Dios es un signo de necesidad de encuentro y mutua. Todo encuentro conlleva una unión de hechos, ideas y sentimientos; en consecuencia, del encuentro hay transformaciones temporales o transcendentales. Dios nos invita a la conversión, a que demos pasos y cambios, significativos en nuestras vidas, para así mejorarlas en todos los aspectos posibles.

P. Chava, SVD


P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Párroco in solidum en Villatuerta, Estella, Diócesis de Pamplona, España.