P. Chava, SVD |
Hechos de los Apóstoles 1,1-11; Salmo 46; Efesios 1,17-23; Mateo 28,16-20
Domingo, 28 de mayo de 2017
Jesús asciende a la
casa del Padre, esa es la esperanza del cristiano después de la muerte es la vivir
juntos de nuevo con Dios.
En la primera lectura
de Hechos de los Apóstoles, el evangelista Lucas narra los acontecimientos de
la primera comunidades cristianas, como vieron la ascensión de Jesús y la
llegada del Espíritu santo en sus vidas. Sal 46 “Dios
asciende entre aclamaciones; el Señor, al son de trompetas”.
En la segunda lectura descubrimos que Jesús es reconocido como el Hijo
de Dios y por su obediencia filial a Dios, el mismo Jesús recibe en herencia
todo cuanto existe autoridad sobre el cielo y la tierra. Es
dueño de todo y por lo mismo gobierna con autoridad.
En el Evangelio de Mateo, Jesús da toda la
autoridad de Dios, a sus discípulos para que evangelicen al mundo entero, con
la plena confianza que Él estará con ellos hasta el final de los tiempos.
Podrán bautizar a sus elegidos y hacerlos discípulos de Jesús para implanten el
Reino de Dios en la tierra.
P. Chava, SVD |
P. Chava, SVD |
Señor Jesús tú nos llamas a ser tus mensajeros y tus testigos en la tierra. Envíanos a evangelizar en tu nombre, ayúdanos y fortalécenos con el Espíritu Santo. Concedemos dar frutos para la gloria de Dios. Que se haga tu voluntad en nuestras vidas. Amén.
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo
Divino, Vicario de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de
Madrid, España.
P. Chava, SVD |
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