Ascensión del Señor - Ciclo B
Hechos
de los Apóstoles 1,1-11; Salmo 46,2-3.6-7.8-9; Efesios 1,17-23; Marcos 16,15-20
12
de mayo de 2024
La Ascensión del Señor se convertirá en el inicio del caminar de los
misioneros, que son llamados por el Señor, para llevar la Buena Noticia e
implantar el Reino de Dios en la tierra. Jesús es el Señor de señores, el Rey
de reyes. Los misioneros tienen la bendición de Dios para cumplir la misión que
se les encomendó. Siente el llamado de Dios para anunciar su Buena
Noticia. Jesús te ama, y te escogió.
En Hechos de los Apóstoles san Lucas, nos narra la Ascensión del Señor, que fue cuarenta días después de la Resurrección de Jesús. Él se aparece de nuevo a sus apóstoles y no deja duda de que ha resucitado de entre los muertos, porque Jesús después de su muerte: comió con ellos, probando que no es un fantasma u algún espíritu. Les ordena que no dejen Jerusalén y que esperen la venida del Espíritu Santo que los bautizará con fuego, para recibir la fuerza de Dios para así poder salir a predicar la buena noticia desde ahí hasta los confines del mundo.
En la segunda lectura san Pablo, reza al Padre de la vida, para que dé a los cristianos el Espíritu Santo y les revele que Dios ha colocado a Jesús a su derecha como príncipe de las naciones presentes y futuras, como gobernador de cuanto existe. El poder del Padre es superior a todo incluso sobre la muerte, a tal grado, que resucitó a Jesús, por eso los fieles entienden el gran poder de Dios sobre el mundo. Y desde entonces la Iglesia se tornaría en el cuerpo visible de este poder, siendo ella el cuerpo místico de Cristo.
En
el evangelio según san Marcos: vemos como Jesús, transmite su poder a sus
misioneros; para que proclamen la Buena Noticia, para que tengan autoridad para
bautizar y salvar; para predicar en nuevos idiomas; para sanar a enfermos con
la oración e imposición de manos; para que ningún mal les dañe. Después les da
autoridad y responsabilidad para cumplir su Buena Noticia. A continuación, el
Señor Jesús ascendió al cielo y se sentó a la derecha del Padre. Con la ayuda
de sus discípulos como misioneros: el Evangelio llegará hasta los confines del
mundo y los misioneros del Señor son bendecidos y acompañados por Dios en la
misión para que proclamen la Buena Nueva a toda la humanidad por los siglos de
los siglos.P. Chava, SVD
La misión que Jesús a sus discípulos es la de no olvidar su mensaje, y para ello pide a cada uno que dedique parte de su tiempo, trabajo y bienes para el servicio de la construcción del Reino de Dios aquí en la tierra. La Iglesia, como cuerpo visible de Jesús aquí en la tierra tiene el deber y el derecho de administrar los bienes recibidos para la misión y organizar a los misioneros para la labor de evangelizadora en las realidades donde este: en las Iglesias, en las comunidades cristianas, en caritas, en los hospitales, en la educación, y cualquier tarea donde esté un cristiano, para así, dar vida en nombre de Dios.
P. Chava, SVD. Misionero del Verbo Divino. Párroco de la parroquia Nuestra Señora del Carmen, Diócesis Sevilla, España.
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