Sabiduría 7,7-11; Salmo 89; Hebreos 4,12-13; Marcos 10,17-30
14 de octubre de 2018
P. Chava, SVD |
Seguir a Dios sin condiciones, es darse por
completo a plan salvación de Dios en nuestras vidas. Tener a Dios como
referente en nuestras vidas, es la mejor decisión que podemos hacer, para la
construcción del Reino de Dios en nuestro tiempo real, aquí y ahora.
En la
primera lectura el autor quiere poner como máxima de vida el valor de la
sabiduría, vivir conforme a la tradición basado en hacer la voluntad de Dios;
porque muchas gentes poco a poco van valorizando otra cultura y tradiciones
olvidándose de su pasado, de su cultura y religión. Unámonos a Dios diciendo Salmo
89 “Sácianos de tu misericordia, Señor”.
P. Chava, SVD |
En la
segunda lectura nos enseña que la Palabra de Dios, es tan importante en nuestra
vidas, que no nos podemos olvidar de sus enseñanzas como guía de vida en la
parte moral y forma de ser, por eso ante Dios nuestro actos serán buenos o
malos conforme a la voluntad de Dios y su plan de salvación, con la
construcción del Reino de Dios.
En el Evangelio,
Jesús nos dice: que para ganarse la vida eterna, no sólo basta con cumplir la
ley de Dios, es decir, los mandamientos que Señor nos manda cumplir, sino
también implica ser generoso con los más necesitados y seguir a Jesús, pues
renunciar a los bienes materiales significa total confianza en Dios. Y los que ya lo hacen, saben
que Jesús les dice que en vida ya reciben su recompensa, recibirán el ciento
por uno por cada renuncia, además de ganar la vida eterna en el futuro.
P. Chava, SVD |
Amar a
Dios y al dinero no es compatible, por eso tenemos que tomar decisiones que
implícitamente nos llevan a renuncias, pero en cada renuncia viene seguido un
compensación, pero no olvidemos que también puede venir en ocasiones: “tiempos
de persecución” por causa de anunciar la Buena Nueva. Sin embargo seguir a
Jesús nos da garantía de alcanzar la vida eterna en vida.
P. Chava, SVD: Misionero del Verbo Divino, Vicario
de la Parroquia Nuestra Señora de Altagracia, Diócesis de Madrid, España
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